Si te sentís triste, desganado o cansado la mayor parte del tiempo.
Si pensás que la vida no tiene sentido, que no encajás en este mundo, en esta sociedad.
Si pensaste alguna vez en la posibilidad de no seguir viviendo.
Si no te animás a contarle todo esto a tus afectos, si no sabés por dónde empezar a pedir ayuda.
Si te da vergüenza contar lo que te está pasando.
Si las veces que pediste ayuda no te entendieron, te juzgaron o simplemente te dijeron que te levantes, o “que le pongas onda”, o que salgas al aire libre, que si dejás el encierro te vas a sentir mejor, y levantarte solamente te parece una tarea imposible. 
Si perdiste a alguien que se sentía así.
Si esa persona era tu hijo, tu hermano, tu amigo.
Si no la perdiste pero sabés que se siente así y no sabés cómo ayudarlo…

En cualquiera de los casos anteriores, vamos a tratar de ayudarte.

Con las herramientas y la estructura que tenemos hoy.
Para eso armamos grupos que tratan esta temática en particular.
Para que puedas encontrarte con pares, y en ese encuentro empieces a dejar de sentirte tan solo.
Para que empieces a crear tu propia red, para que hables, para que escuches. ¨
Para que pidas ayuda, para que ayudes a otros aunque hoy eso te suene imposible.

Los grupos que estamos armando son: